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Cómo se transmite y contagia el virus del Ébola

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Cómo se contagia y transmite el Ébola
El contacto directo con fluidos corporales (sangre, semen, excreciones, saliva) de una persona infectada es la principal vía de transmisión humana. El riesgo de propagación entre el personal del hospital es muy alto, sobre todo si no se garantiza la esterilización de los equipos.


En las zonas endémicas, la falta de higiene y de seguridad causa la muerte por contagio de médicos y enfermeras durante las epidemias, favoreciendo así las infecciones nosocomiales.

La transmisión del virus se puede realizar también por el contacto cercano con los familiares del paciente. Contacto cercano significa un contacto directo con los fluidos corporales de una persona infectada, ya sea vivo o muerto. La sangre es la fuente que contiene mayor carga viral.

El número promedio de personas a las que un infectado contagia el Ébola (índice R) está entre 1,3 y 1,8. Esto significa que en unas dos semanas el número de casos de Ébola puede duplicarse.

Los ritos funerarios de algunos pueblos de África Central, como lavar el cuerpo y luego enjuagar las manos en una cuenca común, favorecen la propagación del virus del Ébola a través de la familia y los amigos de los fallecidos y familiares. Los casos de transmisión a través de semen se han producido hasta siete semanas después de la recuperación clínica del paciente. El contagio puede ocurrir en personas que manejan primates infectados, vivos o muertos, por ejemplo los monos Cercopithecus que se venden en los mercados de carne de caza en la República Democrática del Congo. En las zonas donde los murciélagos de la fruta son particularmente abundantes, como en Abiyán, este animal es una fuente grave de la infección.

Transmisión por el aire


En condiciones experimentales, el virus también pasa a ser transmitido por el aire a través de gotitas o partículas de aerosol. El Departamento de Salud de Canadá afirma que existe una fuerte sospecha de transmisión aérea del Ébola, y el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos admite que el Ébola se puede transmitir en situaciones en las que no hay contacto físico entre las personas, es decir, a través de la inhalación de aire directamente en los pulmones o en los ojos, o por medio del contacto con fómites (objetos inorgánicos infectados) transportados en el aire que se adhieren a las superficies cercanas. Eso ayuda a explicar por qué un gran número de médicos, enfermeras y otros trabajadores de la salud han muerto en África occidental hasta la fecha a pesar de las precauciones como vestidos, guantes y máscaras.

El principal modo de transmisión de persona a persona del virus del Ébola es a través del contacto directo con el cuerpo o los fluidos corporales de los infectados, pero no es prudente ignorar el contagio por suspensión en el aire.

Cuando se supo la noticia de que el virus del Ébola resurgió en Uganda, investigadores canadienses realizaron estudios que indicaban que el virus puede extenderse entre las especies a través del aire. El equipo, compuesto por investigadores de la Universidad de Manitoba y de la Agencia de Salud Pública de Canadá, observó una transmisión del Ébola de los cerdos a los monos. Primero se inoculó a varios lechones con la cepa Zaire del virus del Ébola (la cepa más letal, con tasas de mortalidad de hasta el 90%). Los lechones se colocaron en una habitación con cuatro macacos, y los animales fueron separados por jaulas de alambre para evitar el contacto directo entre las especies. A los pocos días, los lechones inoculados mostraron signos clínicos de infección por Ébola. Después de ocho días de exposición, dos de los cuatro monos mostraron signos de infección del Ébola. Cuatro días más tarde, los dos monos restantes estaban enfermos también. Aunque el estudio proporciona evidencias de que la transmisión del Ébola entre especies es posible, los investigadores aún no pueden decir con certeza cómo ocurrió en realidad esa transmisión. Hay tres posibles candidatos para la vía de transmisión: el aire, las gotas o los fómites.

Las partículas aéreas cargadas con virus del Ébola viajan a través del aire para infectar a otras personas; la diferencia radica en el tamaño de las partículas infectivas. Las gotitas más pequeñas permanecen en el aire por más tiempo y son capaces de viajar más lejos. Estas gotitas están realmente "en el aire." Las gotitas más grandes no pueden viajar tan lejos ni persistir en el aire mucho tiempo. Los fómites son objetos inanimados que pueden transmitir la enfermedad si están contaminados con agentes infecciosos (células de la piel, pelos, etc). En este estudio, la jaula de un mono podría haberse contaminado cuando los trabajadores estaban limpiando una jaula de cerdos cercana. Si el mono tocó la superficie de la jaula contaminada y luego su boca o sus ojos, podría haber sido infectado. El doctor Gary Kobinger sospecha que el virus se transmite a través de gotitas, y no de fómites, porque la evidencia de infección en los pulmones de los monos indica que el virus se inhala.

Sin embargo, debido al hecho de que los brotes de Ébola conocidos hasta ahora se han contenido a nivel local, parece poco probable que el Ébola pueda propagarse entre los humanos a través del aire.